El diputado Mariano Mansilla (Frente de Todos) presentó un proyecto de ley para que el gobierno provincial le transfiera al municipio de Rincón de los Sauces el yacimiento de las áreas Aguada del Chivato y Aguada Bocarey, actualmente concesionadas a la firma Medanito. Bajo este marco legal, el municipio podrá explotar el yacimiento en cuestión por un plazo de 99 años.
El articulado establece que la provincia cederá la totalidad de las regalías hidrocarburíferas que correspondan a la explotación de ambas áreas petroleras. Por su parte, el municipio de Rincón de os Sauces deberá crear un Ente Autárquico Municipal encargado de llamar a concurso público para la exploración, desarrollo, explotación e industrialización de los recursos peroleros y gaseosos de las áreas bajo la órbita municipal.
El Ente administrará los recursos derivados de la actividad de las áreas en cuestión y su directorio estará conformado por representantes del Concejo Deliberante y del Ejecutivo local.
Con los recursos económicos generados por la explotación de los yacimientos que componen las áreas cedidas y sus regalías, el Ente Autárquico Municipal creará el fondo de Reconversión Productiva, destinado a financiar el desarrollo de actividades productivas públicas y privadas que generen mano de obra local. Se establece, además, un porcentaje de las reservas de dicho fondo a fin de ser destinado a infraestructura (10%) y a capacitación laboral (otro 10%).
Los fundamentos informan que en la provincia hay nueve localidades con poco más de tres mil pozos activos a su alrededor. De esos tres mil, el 54% se ubican en la localidad de Rincón de los Sauces.
En ese marco, destacan que la administración de uno de los bloques petroleros que circundan a la comuna en cuestión permitirá transferir a la ciudadanía la responsabilidad de gestionar directamente y por primera vez en la historia, parte de la riqueza que surge de la explotación de los recursos del subsuelo.
Ello implica democratizar y ampliar la participación local en la administración de los bienes comunes, fortaleciendo la autonomía municipal y la independencia económica a través de mecanismos de absorción de mayor parte de la renta petrolera en beneficio de las comunidades directamente impactadas por la industria.
